Guerrero está viviendo una época convulsa en la que la violencia contra activistas, luchadores y dirigentes sociales ha incrementado, así lo denunció el diputado local por Morena, Masedonio Mendoza Basurto.
En la sesión que celebró ayer la Comisión Permanente del Congreso local, el legislador tuvo una intervención para hablar del caso de Arnulfo Cerón Soriano, activista del Frente Popular de la Montaña, quien tenía una amplia trayectoria en defensa de derechos humanos y de quien su cuerpo fue encontrado a finales de 2019 en una fosa clandestina del municipio de Tlapa, tras estar desaparecido 40 días.
En su participación, Mendoza Basurto dijo que no podía hablar del tema sin referirse a la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa en septiembre de 2014, hecho que provocó una gran conmoción en el país y a nivel internacional.
Recordó que en Guerrero “las atrocidades y crímenes violentos” son comunes desde la etapa conocida como Guerra Sucia (1969-1979), en la que fuerzas federales y estatales cometieron crímenes con carácter de lesa humanidad.
“Como resultado de esto, hoy tenemos una tendencia de que existen diversos cárteles de la droga que conforman la delincuencia organizada, misma que se ha infiltrado en algunas instituciones estatales, incluyendo la policía, provocando que la población de Guerrero se vea cada vez más atrapada entre la violencia del Estado y la de dichos cárteles”.
El diputado morenista lamentó que la población de Guerrero esté perdiendo su capacidad de asombro ante estas circunstancias, así como del tortuguismo procesal que hay en el sistema de justicia del estado.
“Estamos viviendo una época convulsa ante esferas sociales inimaginables de violencia contra activistas, luchadores y dirigentes sociales, tal es el caso de Arnulfo Cerón Soriano, un hermano indígena que no buscaba otra cosa que no fuera la libertad, la igualdad y la paz de su pueblo. Es más, en muchas ocasiones fui testigo de su altruismo y de ese amor desinteresado por el bien común”.
Al respecto, Mendoza Basurto recordó el compsomiso que asumió el presidente, Andrés Manuel López Orbador de que habrá justicia en el caso de Arnulfo Cerón y que el gobierno federal no protegerá a ninguno de los responsables de ese crimen.
“Esas fueron las palabras del primer mandatario de la republica de México y en vísperas de lo que será el último año de su administración, es menester decirle que tenemos la esperanza puesta de que habrá resultados y que la justicia triunfará”, concluyó.