Trabajadores del Poder Judicial de la Federación marcharon y protestaron en un evento en el que se encontraba la gobernadora Evelyn Salgado Pineda en Chilpancingo, con la finalidad de pedirle su intervención para contar con garantías laborales, después de que los congresos federal y estatales aprobaron la Reforma Judicial.
En un primer momento, los trabajadores del Poder Judicial Federal se reunieron en el edificio que alberga al Tercer Tribunal Colegiado de Circuito en materia Civil y de Trabajo, ubicado en el boulevard Vicente Guerrero, donde llevaron a cabo un mitin.
Posteriormente, salieron en marcha hacia las instalaciones del Congreso del Estado, y más tarde hacia el Recinto Oficial del Poder Ejecutivo del Estado (Palacio de Gonbierno), donde sólo lanzaron consignas.
Los manifestantes, al enterarse de que la gobernadora Evelyn Salgado Pineda se encontraba en las instalaciones del Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense, donde inauguraba la Clínica de Neurodesarrollo, se trasladaron para ese lugar.
Al llegar, se instalaron en los accesos del nosocomio con lonas en mano y gritaron consignas en defensa del Poder Judicial Federal.
Mientras el evento de gobierno se llevaba a cabo en el interior de ese hospital, en las afueras, los trabajadores inconformes, con el uso de megáfono exigieron ser escuchados por la mandataria estatal, y cada que veían pasar a alguno de los funcionarios estatales, les gritaron “cobardes e indolentes”.
Hubo un momento en que le gritaron a la gobernadora que atienda las demandas de la sociedad, y por lo menos en dos ocasiones le cantaron estrofas de la canción, “Como una flor”, dijeron que para “motivarla a que nos atienda”, tema que la mandataria estatal interpretaba en sus actos de proselitismo.
Así permanecieron durante más de 40 minutos, por lo que la circulación en el encauzamiento Huacapa en el sentido Norte-Sur fue suspendida, y la circulación desviada con el apoyo de policías de tránsito, hacia el boulevard Vicente Guerrero.
Cuando los manifestaron consideraron que no serían atendidos por la gobernadora de Guerrero, se retiraron del lugar y regresaron al edificio que alberga sus oficinas, no sin antes advertir que seguirán manifestándose en el transcurso de la semana.