El director del Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, calificó como lamentable el proceso mediante el cual el Congreso del Estado de Guerrero eligió a Cecilia Narciso Gaytán como titular de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado, al señalar que no mantiene un vínculo cercano con las víctimas de desaparición forzada.
Criticó que los legisladores locales replicaran el modelo aplicado en la Ciudad de México, en el que se abre una convocatoria y se aplican exámenes a los aspirantes, pero finalmente se ratifica a la misma persona en el cargo. “Es lamentable. Reprodujeron el mismo esquema”, señaló.
El activista sostuvo que tanto la Comisión estatal como la nacional se encuentran “manoseadas” por intereses políticos y partidistas, lo que, a su juicio, socava la autonomía institucional necesaria para ejercer contrapesos frente al poder. “Es necesario que haya instituciones que vigilen el comportamiento de las autoridades”, subrayó.
Calificó como urgente que organismos como las comisiones de derechos humanos hagan valer la ley y sancionen las violaciones a los derechos fundamentales. Sin embargo, consideró que en Guerrero la comisión se encuentra “achicada” y reducida a acciones meramente formales y actos públicos, sin un compromiso real con las víctimas.
“Se trata de una comisión que no representará a las víctimas”, advirtió, al señalar que este distanciamiento genera desconfianza en quienes deberían ser acompañados y escuchados por la institución. “¿Cómo vas a confiar en alguien que no está cerca de ti, que no le da credibilidad a tu voz? En lugar de ganar simpatía, está generando antipatía”, concluyó.