La escases de agua en Chilpancingo, en parte se debe a que los administradores han dejado de hacer su trabajo: Alfredo Méndez-Plantea inversión para almacenamiento de agua
En Chilpancingo los “administradores del agua” han dejado de hacer su trabajo y combinado con los problemas ambientales, se ha dado pie a que se genere la actual crisis de agua, aseguro Alfredo Méndez, Coordinador de la Unidad de Biología de la UAGro.
El catedrático e investigador universitario enfatizó que el tema de la administración y cuidado del agua debería ser prioritario en la agenda de los tres niveles de gobierno, y comenzar a resolver la crisis de agua, para evitar que se siga agravando la problemática del desabasto del vital líquido en la ciudad.
“Yo empezaría con este dato porque hemos estado estudiando lo que pasa en la cuenca del Huacapa, pues ya por varios años en diferentes aspectos en lo que tiene que ver con los fenómenos o el proceso natural, pero también lo que pasa con la población, y es que el volumen de agua acumulado durante la temporada de lluvias alcanzaría para abastecer más de 20 veces la población de Chilpancingo, esa es el primer dato, es decir, no es que no haya agua, el problema tiene que ver con la estrategia y capacidad para almacenamiento”, sostuvo el universitario.
El también director del Proyecto Pronace Agua, aseguro que en la capital del estado tiene mucha agua, principalmente de lluvia, pero no se tiene los dispositivos para poder contenerla y administrarla y en unas horas esta agua se pierde.
Por ello, pondero la importancia de que los administradores del agua atiendan la necesidad de contar con estrategias efectivas para la captación del agua, y no sólo en depósitos oficiales, sino ense;ar a la población a hacer lo propio, para que se aproveche el agua pluvial en los domicilios y que pudiera almacenarse en una cisterna, como parte de una política pública.
De esa manera reduciría la presión que tiene la paramunicipal, Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach), tanto económica, como socialmente, ya que el costo de “bombear” el agua a los hogares en la capital es en promedio de 2 millones de pesos, por concepto de energía eléctrica solo del sistema Acahuizotla.
Alfredo Méndez consideró que solo reduciendo esos gastos “se generarán ahorros que podrían invertirse en infraestructura para almacenar agua”.
Agregó que Chilpancingo no tiene problemas fuertes de contaminación atmosférica, lo que se traduce que el agua de lluvia es mejor que el agua de pipas con la que se abastecen buena parte de los hogares de la capital y que les afecta severamente la economía familiar.
Una de las alternativas que pudieran ponerse en practica es la “infiltración” de agua en las partes altas para tener disponible esa agua en la época de estiaje, ya que Chilpancingo cuenta con manantiales en diversos puntos que se alimentan de agua “infiltrada” en las épocas de lluvias que van de los 5 hasta los 5 meses y medio año con año.